Para conseguir aumentar la seguridad en tu oficina, además de la protección pasiva en Madrid centro, hay que tener en cuenta otros factores que harán que tu lugar de trabajo sea más seguro y agradable para todos. Te ofrecemos 5 prácticos consejos para que lo logres de forma sencilla.

Mucho cuidado con la electricidad: para empezar, los equipos informáticos y todos los aparatos que tenemos en la oficina, deben estar protegidos de posibles subidas de tensión que nos pueden causar problemas como averías y pérdidas de información.

Imprescindible es contar con elementos de protección pasiva en Madrid centro: si el objetivo es aumentar la seguridad en la oficina, no podemos prescindir de por ejemplo materiales ignífugos para evitar incendios, además de por supuesto disponer de extintores, entre otras medidas de seguridad activa.

El botiquín siempre a mano: sea cual sea tu sector de actividad, el botiquín de emergencias es un elemento que no puede faltar en la oficina. Recuerda comprobar la fecha de caducidad de los medicamentos que incluye y reponerlos en caso necesario.

Apuesta por una oficina ergonómica: para evitar lesiones en tus empleados o compañeros, ten en cuenta la ergonomía. El monitor a una distancia correcta, una iluminación y ventilación adecuada o una buena higiene en la postura son claves.

El orden es muy importante: si no tienes cajas o cualquier otro objeto amontonado en las zonas de paso será mucho más fácil evitar tropiezos y caídas. Lo mismo para los cables y otros elementos que nos pueden jugar una mala pasada. Evitar la ocasión es mucho más fácil de lo que parece.

Trabajar en un entorno seguro es vital para mejorar la productividad y evitar accidentes. Desde Grupo Coma, como expertos en protección pasiva, te animamos a poner en práctica estos sencillos consejos. Si necesitas información adicional, estamos a tu disposición para cualquier consulta.